BENEFICIOS AMBIENTALES

Los arboles mejoran la salud, puesto que producen múltiples beneficios en nuestras ciudades.

En relación con la atmósfera uriana, los árboles actúan como reguladores de temperatura, aportando beneficios microclimáticos, limpian el aire, fijan suciedad partículas de polvo, absorben ozono, C0₂, dióxido desulfuro y otros contaminantes y componentes de la lluvia ácida y mejoran el confort .

Existen estimaciones de que se puede reducir hasta un 60% la presencia de partículas en las calles con árboles. De esta forma, en la superficie cubierta por árboles en un parque urbano de 212 has, se eliminan 21,77 Kg/día de partículas, 5.800 Kg/día de dióxido de carbono, 2,71 Kg/día de dióxido de azufre y 0,9 Kg/día de monóxido de carbono.

Es importante reseñar que los árboles urbanos son 15 veces más eficientes en fijar C02 que los forestales y que alcanzan su mayor estado productivo de fijación de  C0₂ a los 10 años

Además, en la hidrología urbana, los árboles bien estructurados previenen la erosión estabilizando el suelo, reducen los efectos de las tormentas de lluvia, ya que sus copas interceptan y evaporan agua antes de que llegue al suelo y además la vegetación permite la infiltración de agua.

Los ruidos indeseados pueden ser reducidos a través de plantaciones cuidadosas de árboles y arbustos a lo largo de carreteras y en zonas residenciales e industriales. Los árboles filtran los vientos de los huracanes ayudan a prevenir mayores pérdidas y además conservan la energía en edificios.

Es importante señalar que protegen las fuentes de agua y suelo, reducen la cantidad de contaminantes en riachuelos, lagos y otros lugares de recogida de agua de tres formas diferentes: por un lado, interceptando y almacenando el agua de lluvia con sus hojas, la superficie de las ramas y la corteza del tronco, reduciendo así el volumen de contaminantes.

Por otro, las raíces incrementan la capacidad y la tasa de infiltración del agua de lluvia y, por último, las copas de los árboles reduce  erosión disminuyendo el impacto de las gotas sobre la superficie

Por otra parte sabemos que el arbolado urbano puede afectar directa e indirectamente a la calidad del aire alterando el medioambiente atmosférico urbano. Es capaz de eliminar la contaminación gaseosa absorbiendo los productos contaminantes por el estoma de las hojas y algunos por la superficie del árbol.

Árbol en carretera, donde se ha demostrado su interés tanto medioambiental, minorando la contaminación del aire, como desde el punto de vista de la seguridad, ayudando a la conducción y disminuyendo el número de accidentes.

En recientes estudios se ha demostrado que un arce (Acer sacharinum) de 31 cm de diámetro nominal situado a lo largo de una autopista puede eliminar en la estación de crecimiento hasta 60 mg de cadmio, 140 mg de cromo, 820 mg de níquel y 520 mg de plomo del medioambiente. La emisión de compuestos orgánicos volátiles (VOCs) puede contribuir a la formación de ozono y monóxido de carbono, su liberación depende de la temperatura y ya que los árboles generalmente la disminuyen, un incremento en la superficie de copa puede reducir las emisiones de VOCs y consecuentemente los niveles de ozono contaminante en zonas urbanas.